100 LA REBELIÓN CRISTERA, Celia Calderón
El alto clero católico, bajo la dirección del Vaticano, no dejó de oponerse a la Revolución Mexicana, aun cuando ésta ya había triunfado en el campo de las armas. Se lanza una violenta campaña contra la Constitución y las leyes revolucionarias y alegando una intolerancia que nunca existió organizó una insurrección armada que estalló en 1926 y duró tres años. Los "cristeros", ejércitos de la contrarrevolución reclutados entre las masas atrasadas del campo por el clero y sus agentes, hicieron gala de fanatismo, de crueldad y de inconsciencia en su lucha contra el nuevo orden.